Tenemos la idea de que los cuentos tradicionales son machistas y que el papel de la mujer siempre es sumiso y pasivo. Hay razones para ello. Pero también existen cuentos en los que las protagonistas son autónomas, resolutivas y “toman las riendas de su destino”.
Alberto Sebastián lleva 25 años de cuentos ya. Reivindica el poder de la palabra y la mirada para hacer recuperar al público las sensaciones, ya olvidadas, que produce escuchar historias. Esto lo hace posible desde la sencillez y la cercanía que proporciona un taburete en la esquina de un café, una biblioteca o el escenario de un teatro