Cuentan y no paran de contar que no hace mucho tiempo, en un lugar muy al sur de todos los sitios, unos cuantos amigos se reunieron al filo del anochecer y decidieron salir por esos caminos en busca de seres encantados, damas blancas y animales habladores. Empresa extremadamente difícil, ¿no os parece?.

Poco a poco fueron hallando lo que buscaban, pero no en cuevas oscuras, ni en castillos perdidos, ni en granjas encantadas, no. Lo hallaron en la memoria de la gente con la que se iban encontrando. Y es que esos amigos eran buscadores de historias, ese lugar del sur era Andalucía y eso que buscaban no era otra cosa que los relatos más viejos del lugar, cuentos contados y olvidados.

Los narradores de LitOral os invitamos a dar un paseo por los caminos perdidos de la memoria y por ese lugar, el Estrecho de Gibraltar, que fue partido en dos por un héroe de leyenda. Un cruce de caminos donde todavía hoy se generan mil y una historias.